Katie era una niña humana que vivía a bordo del USS Enterprise-D en el año 2364.
Ese año, Katie fue uno de los varios niños de Enterprise secuestrados por los Aldeanos en un esfuerzo por repoblar su planeta. En el momento de su secuestro, ella estaba tocando un instrumento musical en sus habitaciones. Inicialmente se asustó al volver a materializarse, pero Wesley Crusher le aseguró que aunque todos tenían miedo, su ubicación era conocida y nadie los lastimaría.
Por encargo de Radue, Katie se convirtió en la protegida de Melian. Cuando aprendió a tocar un instrumento aldeano bajo su tutela, inicialmente creyó que lo había roto, pero él le aseguró que estaba bien, ya que respondía a sus emociones y hacía música en consecuencia. Cuando su próximo intento produjo una canción que sonaba triste, Melian la felicitó y le sugirió que intentara algo más feliz. Extrañando a su familia, ella le dijo que se sentía infeliz y que no deseaba jugar más.
A pesar de su descontento, todavía logró conciliar el sueño, pero Wesley la despertó y, posteriormente, participó en el intento de los niños de resistir pasivamente. Inicialmente cuestionó por qué Wesley pensó que funcionaría, ya que temía que los Aldeanos pudieran enojarse con los niños por hacerlo, pero una vez más Wesley le aseguró que no les harían daño.
Cuando Picard fue enviado a Aldea, Katie saludó al capitán cuando entró en la habitación en la que estaban reteniendo a los niños, ya que Radue les había dado la tarea de interrumpir su protesta.
Más tarde, Katie regresó a la Enterprise-D con el resto de los niños secuestrados. (TNG: "When the Bough Breaks")